A dos meses de haber asumido la dirigencia estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Baja California, Álvaro Aldrete Gruel ha puesto en marcha un proceso de reorganización interna bajo el lema “Limpiando la Casa”, con el objetivo de fortalecer y unificar al partido.

El dirigente priista destacó que la renovación del partido es una tarea fundamental para consolidar una estructura sólida y representativa en la entidad. "Siempre vamos a ser muy respetuosos, un partido empático con las causas, pero vamos a estar allí, puntuales. Siempre vamos a estar muy respetuosos con la gobernadora, con la presidenta municipal, con los diputados, con las personas, pero siempre al pie de la crítica, señalando sobre todo las políticas públicas que no van”, enfatizó Aldrete Gruel.

Como parte de este proceso de reconstrucción, el líder priista reconoció que una gran cantidad de exmilitantes ha migrado a las filas de Morena, sin embargo, su objetivo es mantener a los priistas leales y atraer nuevos integrantes al partido. "Yo voy a mantener a la gente leal al PRI, a la gente buena, que se ha quedado. Voy por los que se fueron, por los que valgan la pena y voy por la gente que nunca ha estado. No es algo que vaya a manejar como bandera, yo quiero traer gente, no quiero correr", afirmó.

Aldrete Gruel subrayó que, en estos primeros 60 días de gestión, se ha centrado en la reconciliación interna del partido y que su meta es reconquistar a los priistas en un plazo de 90 días. Asimismo, aseguró que el PRI tendrá una participación más amplia en las elecciones de 2027, con una estructura renovada y una mayor cohesión entre sus militantes.

Con esta estrategia, el PRI en Baja California pretende reposicionar al partido en el escenario político estatal y consolidarlo como una opción viable para el electorado en los próximos comicios.