El estacionamiento del Hipódromo Caliente se transformó este 30 de abril en un reino mágico donde miles de niños vivieron un día inolvidable. Con el lema “Llegó el momento de soñar”, el evento organizado por Caliente Ayuda con motivo del Día del Niño 2025 ofreció un espectáculo lleno de fantasía, color y alegría que quedó grabado en la memoria de toda una ciudad.

El musical “Sueña, Sueña” fue el corazón del evento, acompañado por el ya tradicional “Gran Concurso de Orejas”, en el que se repartieron más de 2,000 bicicletas y juguetes. Niños y niñas —muchos de ellos por primera vez en contacto con este tipo de espectáculos— disfrutaron de una producción de primer nivel, personajes de Disney y Pixar, música en vivo y una atmósfera que parecía salida de un cuento.

El festejo cumplió 40 años de realizarse de forma continua, salvo por el 2020 a consecuencia de la pandemia por el COVID 19, es una cifra que habla del compromiso y la visión del ingeniero Jorge Hank Rhon, presidente de Grupo Caliente, quien en entrevista con Baja News compartió detalles poco conocidos del origen de esta tradición.

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“Yo llegué a Tijuana sin conocer a nadie, pero esta ciudad me abrazó y me lo dio todo. Desde el primer año supe que tenía que devolver un poco de lo mucho que recibí, y los niños siempre fueron mi prioridad. Empezamos con algo muy modesto… y hoy, ver esto, me llena el alma”, recordó con emoción.

Hank también habló del esfuerzo que implica montar un evento de tal magnitud: “Hay cientos de personas detrás de esto, trabajadores, voluntarios, patrocinadores… pero todos con la misma meta: ver felices a los niños. No hay cansancio cuando ves la sonrisa de un pequeño abrazando su primera bicicleta.”

Durante la entrevista, no solo habló el empresario, sino el ser humano comprometido con su comunidad, ese que muchos conocen por su carácter fuerte, pero que, como lo demuestra año con año, tiene un enorme corazón: “El Día del Niño no se trata solo de regalar juguetes, se trata de regalar esperanza. De decirles a los niños que merecen lo mejor, sin importar de dónde vengan.”

Este 30 de abril, Tijuana no solo celebró a su niñez: celebró cuatro décadas de generosidad, compromiso y amor por su gente, liderados por un hombre que hizo de la ayuda social, una vocación de vida.