Un caso de presunta extorsión en la Central de Abastos ha puesto en evidencia la creciente presión que enfrentan comerciantes tijuanenses por parte de grupos criminales, luego de que un sujeto fuera detenido mientras distribuía mensajes intimidatorios firmados por el llamado Cártel de Tijuana.

El mensaje, entregado físicamente en varios locales del mercado, advertía textualmente:

“Un saludo cordial, somos del Cártel de Tijuana. A partir del 15 de cada mes iniciaremos el cobro por protección. Si no hay respuesta en 6 horas, hablaremos con tu familia.”

Aunque el contenido provocó temor entre los locatarios, el caso tomó un giro inesperado cuando el abogado del detenido aseguró que el documento no contenía amenazas explícitas, sino un “aviso preventivo”, e incluso lo calificó como un mensaje “cordial y amistoso”. Según la defensa, no se exigía dinero de forma directa ni se hacía alusión concreta a un daño físico.

El sujeto fue capturado días después a bordo de un vehículo tipo Jetta, donde transportaba varios mensajes similares aún sin entregar. Inicialmente fue imputado por terrorismo y resistencia a la autoridad; sin embargo, el juez reclasificó los cargos a amenazas simples. A pesar de ello, se le impuso prisión preventiva, ya que la Fiscalía argumentó que estos actos generan temor colectivo y forman parte de una estrategia de extorsión cada vez más común en la ciudad.

Las autoridades estatales confirmaron que este no es un hecho aislado. En distintos puntos de Tijuana se han documentado intentos similares de extorsión a pequeños comerciantes, quienes denuncian haber sido obligados a pagar hasta dos mil pesos semanales como “cuota de protección” para evitar represalias.

Como parte de las investigaciones, la Fiscalía también logró detener a otros presuntos implicados, identificados como Alberto N., alias “El Vale”, y Fabi Giovanni N., alias “El Next”, quienes operaban desde un vehículo de plataforma para entregar las amenazas.

La Fiscalía General del Estado informó que trabaja de manera coordinada con el programa federal contra la extorsión para frenar esta práctica delictiva, que se ha convertido en una de las principales preocupaciones de los sectores productivos locales.

“Este tipo de actos, aunque intenten disfrazarse de acuerdos o avisos, buscan someter mediante el miedo. No se tolerarán”, señalaron fuentes cercanas al caso.

Las autoridades exhortan a comerciantes y ciudadanos a denunciar cualquier intento de extorsión, recordando que existen canales seguros y anónimos para presentar información que permita avanzar en las investigaciones y desmantelar redes criminales activas en la región.