Novak Djokovic volvió a demostrar por qué es uno de los grandes del tenis mundial al imponerse con carácter y experiencia en los octavos de final de Wimbledon. El serbio superó al australiano Alex de Minaur en cuatro sets, luego de un inicio complicado en el que cedió el primer parcial por 1-6. A partir del segundo set, Djokovic ajustó su juego y dominó los siguientes tres con parciales de 6-4, 6-4 y 6-4, asegurando así su pase a los cuartos de final del torneo londinense.

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El partido significó un nuevo hito para el tenista de Belgrado, quien alcanzó su 63.º cuartos de final en un torneo de Grand Slam, reafirmando su vigencia en el circuito con 38 años. Además, Djokovic alcanzó su victoria número 100 en Wimbledon, una marca que solo unas pocas leyendas del tenis han logrado en un mismo Grand Slam.

La remontada fue una muestra clara de la fortaleza mental del ex número uno del mundo. Tras un primer set repleto de errores no forzados, Djokovic se reacomodó, redujo sus fallos y comenzó a imponer su ritmo desde la línea de base. Su capacidad para adaptarse a las circunstancias volvió a ser decisiva, así como su dominio del juego en los puntos importantes.

En la siguiente ronda, Djokovic se medirá con el joven italiano Flavio Cobolli, quien llega por primera vez a esta instancia en Wimbledon. El serbio continúa su camino en busca de un octavo título en el césped del All England Club y de ampliar su récord de torneos de Grand Slam, que actualmente se mantiene en 24.