Sean "Diddy" Combs fue una figura influyente en el hip-hop con Bad Boy Records, su marca personal y negocios en moda y televisión, pero su legado se ha desmoronado tras ser acusado de tráfico sexual y crimen organizado.

En 1997, el ex ejecutivo musical Daniel Evans recuerda una amenaza de muerte de Combs a un colega, reflejando su transformación con el poder y el dinero.

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Ese año, Bad Boy Records celebró un gran éxito financiero, pero ex empleados han denunciado abusos y un ambiente de excesos dentro del sello.

Ex trabajadores describieron conductas inapropiadas de Combs, incluyendo encuentros sexuales con mujeres en aparente inconsciencia y el uso de fondos corporativos para actividades ilícitas.

Según el abogado Tony Buzbee, los abusos de Combs comenzaron en los 90 y se intensificaron con el tiempo, incluyendo una presunta violación en 1995 con amenazas de desaparición.

Su equipo legal ha rechazado las acusaciones, calificándolas de "ficción" y asegurando que confían en el proceso judicial.

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Combs cultivó una imagen de opulencia con eventos como las "Fiestas Blancas", atrayendo a celebridades y políticos como Donald Trump.

Ex empleados denuncian un entorno laboral abusivo; una ex gerente relató cómo Combs pedía condones para sus fiestas privadas.

En 2023, Casandra Ventura lo demandó por abuso y tráfico sexual, y un video de 2016 reavivó denuncias pasadas.

Enfrentará juicio en mayo de 2025, con antiguos allegados divididos entre la incredulidad y la convicción de que su poder reveló su verdadera naturaleza.