El ejército israelí informó el domingo la retirada de parte de sus fuerzas desplegadas en la ciudad de Jan Yunis, al sur de Gaza, marcando así el cierre de una etapa significativa de su ofensiva contra el grupo armado Hamás, reportó The Associated Press. La medida ha reducido su presencia en el territorio a niveles mínimos desde el inicio del conflicto hace seis meses.

Según informó Reuters, los residentes palestinos de Jan Yunis informaron haber presenciado la retirada de las fuerzas israelíes del centro de la ciudad hacia los distritos orientales. Actualmente una única brigada israelí permanece en el sur para asegurar un corredor entre Israel y la costa de Gaza, bloqueando el acceso al norte de la Franja y facilitando las operaciones en el centro y norte del territorio.

Tras la retirada de la  98.ª división de Israel, algunos residentes palestinos estaban retornando a la ciudad devastada de Khan Younis el lunes. The Guardian señaló que muchos de ellos caminaron desde la cercana Rafah y se encontraron con un paisaje desolador.

En el Cairo, esta semana comenzaron nuevas conversaciones de alto el fuego, con delegaciones tanto de Israel como de Hamás, de acuerdo con The Washington Post.

Aunque el domingo algunos comentaristas israelíes sugirieron que la retirada de las fuerzas israelíes marcaba el posible fin de los combates intensivos en Gaza, oficiales militares indicaron que las tropas se están simplemente reagrupándose mientras el ejército se prepara para entrar en el último bastión de Hamás, Rafah. 

El teniente general Herzi Halevi, jefe del ejército, afirmó: "La guerra en Gaza continúa, y estamos lejos de detenernos". Según informes de la cadena local Canal 13 TV retomados por Euronews, Israel se está preparando para iniciar la evacuación de Rafah en menos de una semana, un proceso que podría extenderse durante varios meses.

Este miércoles informaron que Hamas no puede localizar ni identificar a 40 rehenes israelíes, que son necesarios para la primera fase del acuerdo para el alto al fuego, por lo que se sospecha de que hayan más rehenes muertos, de los que se tenía conocimiento públicamente.