La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su solidaridad con el papa Francisco, quien se encuentra hospitalizado en Roma por una infección respiratoria, y aprovechó una de sus frases para responder a las políticas migratorias del presidente estadounidense, Donald Trump.

Durante un evento público, Sheinbaum recordó las palabras del pontífice argentino, a quien describió como "un humanista" y citó su enseñanza: "Nadie puede ver a otra persona de arriba abajo, salvo que sea para ayudarla a levantarse". Con esta reflexión, la mandataria mexicana respondió a las recientes presiones migratorias de Trump, subrayando que los mexicanos deben ser tratados con dignidad e igualdad.

Sheinbaum enfatizó la importancia de los mexicanos en la economía de Estados Unidos, destacando que contribuyen con el 10% del Producto Interno Bruto (PIB) de ese país. "Somos los mejores trabajadores del mundo", afirmó, mencionando sectores como la construcción, el campo y los servicios, en los que la comunidad migrante mexicana juega un papel clave.

Asimismo, reafirmó el compromiso de su gobierno con la protección de los connacionales en Estados Unidos. "Nunca debemos ser vistos de arriba abajo, porque somos trabajadores y contribuimos al desarrollo de ese país", sostuvo. También envió un mensaje de apoyo a la comunidad migrante: "Desde aquí, les mandamos un saludo cariñoso. Los protegemos desde los consulados y, si deciden regresar a México, los recibimos con los brazos abiertos".

El gobierno mexicano ha registrado la llegada de 13,455 personas deportadas desde que Trump asumió nuevamente la presidencia el pasado 20 de enero, incluyendo 2,970 extranjeros. La mandataria reconoció la preocupación en el país por la amenaza de deportaciones masivas, ya que los mexicanos representan cerca de la mitad de los 11 millones de indocumentados en Estados Unidos. Además, las remesas enviadas por los migrantes han alcanzado cifras históricas, representando casi el 4% del PIB de México en 2024, con un récord de casi 65 mil millones de dólares.

Sheinbaum cerró su mensaje con un llamado a la unidad y al respeto mutuo entre naciones, reafirmando que su gobierno seguirá defendiendo los derechos de los migrantes mexicanos ante cualquier política que busque vulnerarlos.