En un hecho que ha conmocionado a la capital del estado, el subcomandante operativo de la Policía Municipal de Mexicali, Roberto Méndez Arreola, fue asesinado la noche del lunes en un ataque armado que dejó más de 200 casquillos percutidos en la escena del crimen.

El oficial, de 48 años, fue emboscado mientras caminaba sin portar uniforme ni arma de cargo sobre la calle Logroño, en el fraccionamiento Lomas Altas. La agresión se dio poco antes de la medianoche y fue ejecutada con armas largas, presumiblemente fusiles de asalto tipo AK-47.

Según los primeros reportes, los agresores sorprendieron a Méndez Arreola en un ataque directo y coordinado. Su cuerpo quedó tendido en la vía pública, y a su alrededor se localizaron decenas de cartuchos, evidencia de la violencia con la que fue perpetrado el homicidio.

El subcomandante estaba adscrito a la zona rural del Valle de Mexicali, una región que en los últimos meses ha visto un repunte en hechos delictivos relacionados con el crimen organizado.

Tras el ataque, se desplegó un fuerte operativo con elementos de distintas corporaciones policiacas de los tres niveles de gobierno, sin que hasta el momento se haya confirmado la detención de los responsables, quienes lograron darse a la fuga con rumbo desconocido.

Este crimen ocurre apenas 24 horas después de que el teniente coronel Julián Leyzaola Pérez presentara su renuncia como director de Seguridad Pública Municipal. En su lugar fue designado, por segunda ocasión, Luis Felipe Chan, quien ahora enfrentará una de las crisis más complejas en el ámbito de la seguridad en Mexicali.