Este 17 de junio se conmemoran 93 años del nacimiento de Marosa di Giorgio, una de las voces más singulares de la literatura latinoamericana del siglo XX. Originaria de Uruguay, su obra ha desafiado toda clasificación, oscilando entre lo barroco, surrealista y kitsch, con un estilo profundamente personal y provocador.

Autora de libros como Druida, Historial de las violetas y Los papeles salvajes, Marosa construyó un universo literario propio, poblado de flores, frutas, animales y figuras familiares que rozan lo onírico y lo erótico. Su lenguaje, a menudo exuberante y desbordado, rompió con las normas tradicionales de la poesía para trazar una cartografía íntima y subversiva.

Críticos y lectores han destacado que su escritura rechaza tanto los códigos morales como las convenciones estéticas establecidas, en una búsqueda libre y radical de expresión. Su obra ha sido comparada con la de autores surrealistas, aunque nunca adscrita a un movimiento concreto, reafirmando su carácter inclasificable.

A más de nueve décadas de su nacimiento, el legado de Marosa di Giorgio sigue inspirando a nuevas generaciones de escritores y lectores. Su literatura permanece como un territorio fértil y enigmático, donde lo sagrado y lo sensual conviven en un mismo gesto poético.

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