Los Dodgers de Los Ángeles atraviesan un momento crítico en la temporada tras sumar su cuarta derrota consecutiva. Este domingo, el equipo californiano cayó ante los Milwaukee Brewers, extendiendo una racha negativa que comenzó con una barrida de tres partidos en Houston frente a los Astros.

La derrota de hoy evidenció nuevamente las carencias que está mostrando el equipo tanto en el pitcheo como en la ofensiva. A pesar de contar con un plantel plagado de estrellas como Shohei Ohtani, Freddie Freeman y Mookie Betts, los Dodgers no han podido encontrar el ritmo que los caracteriza.

Los tres tropiezos previos ante los Astros fueron especialmente duros, con actuaciones erráticas del bullpen y una ofensiva que no supo responder en los momentos clave. El partido contra Milwaukee parecía la oportunidad perfecta para cortar la mala racha, pero el equipo volvió a fallar, encendiendo las alarmas entre la afición y dentro del propio vestuario.

El mánager Dave Roberts, en conferencia posterior al partido, intentó mantener la calma, sin embargo, la presión aumenta con cada derrota y el margen de error comienza a reducirse si los angelinos quieren mantenerse en lo más alto de la División Oeste de la Liga Nacional.