¿Qué es una conducta pasivo-agresiva?

La conducta pasivo-agresiva es un patrón que consiste en expresar sentimientos negativos de forma indirecta en lugar de abordarlos abiertamente. Hay una desconexión entre lo que la persona que presenta la conducta pasivo-agresiva dice y lo que hace.

¿Cuáles son los signos/actitudes de una persona pasivo-agresiva?

Hostilidad verbal: insultos, amenazas, e hipercriticismos.
Humor negativo: a través de él se denigra al receptor con humor pesado, sarcástico, sobrenombres despectivos.
Tratamiento silencioso: cortar todo tipo de comunicación con la víctima, quitarle habla, ignorarla por completo, someterla a ninguneo y hacer como si no existiera.
Manipulación psicológica encubierta: son amenazas sutiles que tienen como objetivo causar temor
Sabotaje encubierto: implicar el dañar las tareas, proyectos o actividades de la víctima.
Victimismo: es, como su nombre lo dice, tomar siempre la actitud de victima sin importar lo que se haya hecho.
Culpar a otro: así como siempre pretende hacer la víctima, es recurrente que culpen a los demás de todo, por mínimo que sea, para poder manipular por medio de la culpa.

Si bien la conducta pasivo-agresiva puede ser una característica de distintas afecciones de salud mental, no se considera una enfermedad mental en sí misma. Sin embargo, la conducta pasivo-agresiva puede interferir con las relaciones y causar dificultades en el trabajo.